Dos semanas intensivas de tango (de Sevilla a Granada) me han servido para descubrir muchas cosas. Entre ellas, una joya de Borges titulada "Nostalgia del presente":
En aquel preciso momento el hombre se dijo:
qué no daría por la dicha
de estar a tu lado en Islandia
bajo el gran día inmóvil
y de compartir el ahora
como se comparte la música
o el sabor de una fruta.
En aquel momento
el hombre estaba junto a ella en Islandia.
lunes, 21 de marzo de 2005
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2 comentarios:
Me estreno en tu bitácora... y qué lástima no haber visto algo de tango. Pero queda mucho por hacer, ahora que viene la primavera.
inicio mis aportaciones a esta blog con un poema de jaime gil de biedma relacionado con la nostalgia
a ver si os gusta
La nostalgia del sol en los terrados,
en el muro color paloma de cemento
—sin embargo tan vívido— y el frío
repentino que casi sobrecoge.
La dulzura, el calor de los labios a solas
en medio de la calle familiar
igual que un gran salón, donde acudieran
multitudes lejanas como seres queridos.
Y sobre todo el vértigo del tiempo,
el gran boquete abriéndose hacia dentro del alma
mientras arriba sobrenadan promesas
que desmayan, lo mismo que si espumas.
Es sin duda el momento de pensar
que el hecho de estar vivo exige algo,
acaso heroicidades —o basta, simplemente,
alguna humilde cosa común
cuya corteza de materia terrestre
tratar entre los dedos, con un poco de fe?
Palabras, por ejemplo.
Palabras de familia gastadas tibiamente.
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