martes, 25 de octubre de 2005

Ojalá no existieran las puertas de atrás

Desde que tengo tele experimento nuerosas revelaciones que antes ni siquiera intuía. Primero fue el programa de Juan y Medio, al que iré cuando sea una soltera cuarentona de buen ver. Y ayer fue Estoy por tí(que es mucho más moderno y con más glamour).

Pues estaba yo viendo el programa mientras hacía limpieza y llego el momento final en el que la pareja del programa anterior tiene que decidir si se van juntos de vacaciones a Cuba. El panorama era el siguiente:

- Ella: rusa, rubia, altísima, guapísima, que buscaba un hombre inteligente e interesante con el que no aburrirse no necesariamente guapo.
- Él: físicamente normalito, pelo largo un poco cani y con apariencia de ser un chico interesante. Le gusta leer, viajar, el queso... nada espectacular pero con posibles.
- La situación: parece que tiene bastantes cosas en común aunque no se les ve muy decididos. Él bastante impresionado por el físico de ella y ella sin saber muy bien si tanta coincidencia es verdad o fachada.
- El desenlace: llega el momento de tomar la decisión. Los dos se levantan, dudan, vuelven a dudar y ella se acerca a la puerta que la llevará al viaje y él, tras hacer varios amagos tipo "chiquito de la calzada", en un arranque de acojone sin igual, se va por la puerta de atrás, seguramente pensando que ella lo iba a rechazar y no queriendo pasar por ese bochornoso momento. Total, que la puerta se abre y ella se queda con cara de jocker de Batman, al ver que él se ha quitado de enmedio.

Revelación: Ojalá no existieran las puertas de atrás y todo el mundo tuviera que ser valiente y entrar y salir por la puerta principal.
ARRIESGARSE ES VIVIR, aunque todavía muchos no lo saben...

lunes, 24 de octubre de 2005

Simple life

Be positive. Be yourself.

jueves, 20 de octubre de 2005

Modernos

Ya estoy harta de modernos de pacotilla. Esos que van de espíritus libres pero, a la hora de la verdad, se esconden detrás de excusas banales. Esos (y esas) que parece que han salido de una revista de tendencias, que sólo son fachada, que no hacen más que mirarse el ombligo sin entender, sin intentar entender que hay otro mundo posible y válido, tan válido o más que el suyo. Ya estoy harta de tener que mirar sólo hacia los lados. Quiero mirar hacia delante con visión panorámica, que es mucho más amplia, sin perder de vista, eso sí, a quienes están a mi alrededor. Ya estoy harta de cobardes que miran al mundo andando de espaldas, viendo sólo lo que está detrás. Yo al menos, si me tropiezo, puedo ver la piedra me que hizo caer.

lunes, 10 de octubre de 2005

Otoño

Ya no hay escapatoria. Llegó el otoño con intención de quedarse, al menos unos meses. Y luego viene lo peor... Menos mal que este año me pilla preparada. Al menos mi casita nueva parece que no será demasiado fría. Y la pandilla ya está preparada para las actividades invernales: cine, conciertitos, escapadas... Y, sobre todo, mucho cariño. Todo a punto para afrontar el frío con buena cara. ¡Qué remedio!

martes, 4 de octubre de 2005

Llamadas

He empezado el mes de octubre con muy buen pie. A pesar de que tengo las actividades extraescolares abandonadas, el pluriempleo me obliga a seguir la disciplina del trabajo por las tardes, buscando siempre el hueco para disfrutar de los ultimos dias de sol (espero que sean muchos todavía) y arreglar el mundo con los amigos.

El planteamiento de no dispersarme está surtiendo efecto, me veo más centrada, más tranquila y viviendo cada día, con el mañana organizado y la incógnita eterna del pasado mañana. Hasta Arturo me lo ha dicho: que últimamente no me ve tan oscura.

Incluso no me molesta la idea de la fidelidad. Sobre todo, de ser fiel a mí misma, que es lo importante ;-) Y ahora Zaragoza me llama... ¿tendrá algo que ver?