Un año más y yo como siempre... Y no se si eso es bueno o es malo, pero a mí me gusta, que al fin y al cabo es lo que importa ¿no? En realidad el 2005 ha sido un buen año. Muchas ilusiones, nuevos y viejos amigos, amores y decepciones, una pizca de estabilidad, aprendizajes varios y, sobre todo, una gran dosis de felicidad y vuelta a aceptarme a mí misma, con mis cositas, las de siempre y las nuevas.
Sólo espero que el 2006 siga trayéndome buenas sorpresas y siga haciéndome aprender de las malas.
¡FELIZ 2006!
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1 comentario:
Tú, querida amiga y compañera de fatigas, no estás como siempre estás mejor que nunca, porque nunca sabremos cual será el siguiente paso :)
Conviertes las decepciones cortas en aprendizajes para toda la vida; me haces reir, desdramatizas, viajas sin mucho equipaje e improvisas cerca o lejos. Eso es lo que queda.
Te quiere mucho, tu mística :)
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